Pasos para hacerte amigo de tu tigre interior

La emoción explica el 80% de nuestra manera de actuar.

Como hemos comentado en los anteriores post “Emociones y Acciones” y “Domesticar el tigre interior” la emoción explica el 80% del resultado de tu actuar, dado que estamos altamente influenciados por las emociones, “domesticar” de un modo eficaz esta fuerza nuestra para que se convierta en un verdadero recurso a nuestro servicio es clave.

Intentar controlar las emociones desde la lógica es un exceso estas son unas competencias “sin comprensión” que funcionan de otra manera y no respetan la lógica racional. Hoy en la tercera parte vamos a hablar de que pasos podemos dar para hacernos amigos de nuestro tigre interior.

Controlar las emociones con la lógica no es posible.

Ya hemos visto que controlar nuestras emociones con la lógica no es posible así que es necesario hacerte amigo de tus emociones, conocerlas y servirte de ellas, dejar que se expresen y no ceder a ellas pasivamente, sino usar la fuerza de ellas en un sentido constructivo.

Por ejemplo, el miedo puede transformarse en coraje si se acepta y si le seguimos la corriente en un momento nos hará sentirnos dueños de nuestro futuro.

El dolor hay que aceptarlo y dando el espacio necesario para tocar fondo y así tener la posibilidad de que algo nuevo emerja.
La ira o la rabia necesita ser canalizada y darle la posibilidad de expresarse en direcciones no destructivas sino constructivas. De esto va el entrenamiento clave de Praxis Grow: Equipos y Liderazgo.

Todo esto pasa por trabajar lugares que no hemos trabajado anteriormente y sentirnos vulnerables.

Si queremos sentirnos completamente seguros estaremos refugiados en un rincón que va a bloquearnos y va a parar nuestro camino a descubrirnos y descubrir lo nuevo. Esto es un aspecto que nos permite evolucionar, innovar y mantenerte en un sentido más completo pleno y libre.

Como líderes de un equipo, organización o una situación este es un aspecto indispensable, si lo logramos conseguiremos manejar nuestra fuerza adaptativa del cambio.

Aquí se abre un interesante debate, la mente tiende a controlar las emociones y si el tigre se siente enjaulado, tiende a no colaborar. Con las emociones tenemos que utilizar su mismo lenguaje, que no son las explicaciones racionales sino el de las evocaciones y experiencias concretas. Por lo tanto, se trata de comunicar y actuar de un modo adecuado a la dinámica emocional.

Para utilizar una metáfora, El tigre no es un caballo, aún menos una cómoda carroza, hay que respetar sus peculiaridades para conseguir este dominio.